Prueba de grill eléctrico Tefal Optigrill

Recientemente tuve oportunidad de probar un grill eléctrico ampliamente publicitado hoy en día — Tefal Optigrill.
Planeamos a cocinar una montaña de entrecots y claro que yo tenía mucha curiosidad cómo iba a funcionar esta máquina tan «inteligente».
El fabricante asegura que el grill determina si mismo el grado de la preparación y avisa al cliente hambriento que su entrecot perfecto con sangre está listo.
Las medidas del grill me desilusionaron un poco. Un buen entrecote «masculino» de 600−800 gramos ocupa toda la superficie. Y más que uno a la vez — ya es imposible.

Pues, calentamos el grill hasta la temperatura correcta y pusimos este trozo bonísimo de la carne. En 5−7 minutos el grill nos avisó que el entrecote estuvo listo como «Médium» y era la verdad. La carne parecía muy buena, tanto por dentro como por fuera. Super chulo! Sin embargo, todavía teníamos una docena de trozos más para cocinar. Y en este momento pasó lo más triste: el grill Tefal Optigrill dejó de ser «inteligente». Claro, no se rompió, sino cuando se calentó y se puso sucio, su «mente inteligente» ya no podía determinar ni espesor de trozo ni tipo de producto. Y al final simplemente se convirtió en un sartén ordinario, nada más, aunque bonito.
Posteriormente preparamos la carne en esta máquina solo por intuición, combinando la experiencia propia con los conocimientos culinarios. Por supuesto, al haber cocinado un montón de entrecots, ya no necesito usar los trucos extremos para determinar el grado de preparación, por eso preparamos nuestra montaña de carne sin problemas, y la gente se la comió con mucho gusto. La verdad es que tardó cuatro veces más tiempo que cuando usamos, por ejemplo, mi grill chino, sin nombre, con la superficie más grande (link) comprado por 80 Euro solo y que ha sido sirviendo fielmente en mi cocina ya desde hace 5 años (como mínimo tres veces a la semana).
Conclusiones:
Si eres un hombre triste, solitario, no sabes cocinar, sin ganas de lavar platos, pero tienes unos 160 Euro extra, pues esta máquina es para ti. Para ti solo. Y para un trozo de producto, solo uno.
Si al contrario, por casualidad, tienes familia y amigos, los que te piden cocinar una comida deliciosa, en este caso búscate un modelo diferente, más grande y menos «inteligente» (y respectivamente más barato).